MPL - Consejos para la Salud
11/06/2021

Cómo cuidar nuestros ojos de la exposición prolongada a pantallas

Con el aumento exponencial de las horas delante de diversas pantallas, aumenta la incidencia del síndrome de ojo seco. En el presente informe, se expone información sobre el mismo y medidas para su prevención y cuidado de la salud visual

   
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¿Qué es el ojo seco?

El ojo seco es una enfermedad multifactorial de las lágrimas y la superficie ocular que cursa
con molestias, trastorno visual e inestabilidad de la película lagrimal, con un posible daño de
la superficie ocular.

La lágrima es un componente fundamental a la hora de hablar de la salud de nuestros ojos.

Sus funciones son múltiples:

1) óptica, al mantener la superficie corneal ópticamente uniforme.
2) mecánica al generar un lavado de restos celulares y sustancias extrañas en la
córnea y saco conjuntival.
3) nutricia al aportar el oxígeno necesario para la córnea
4) antimicrobiana ya que contiene lisozima, lactoferrina, IgA, (entre otras sustancias)
que protegen nuestros ojos de los patógenos a los que éstos pueden estar
expuestos.

Conociendo estas funciones de la lágrima, resulta fundamental comprender que un film
lagrimal sano y estable
, en conjunto con lo que esto implica, es clave para una buena
salud visual.

En época de pandemia y “home office” el tiempo pasado delante de las diversas pantallas
pareciera no tener fin.
En este contexto de virtualidad, donde entre trabajo y esparcimiento transcurren largas
horas frente a una pantall
a, es frecuente que se manifiesten distintas molestias en
nuestros ojos.

Estas molestias, suelen ser, ni más ni menos que síntomas del Síndrome de Ojo Seco y
pueden ser las siguientes:

1) Sensación de cuerpo extraño (“cómo si tuviera algo dentro del ojo” / sensación de arenilla)
2) Irritación ocular (ojos rojos)
3) Lagrimeo
4) Pesadez de párpados
5) Prurito (picazón ocular)
6) Ardor
7) Fotosensibilidad
8) Fluctuación en la visión (visión borrosa)

Del listado de arriba, se desprende que la sintomatología del ojo seco es diversa así como también son diversas sus causas.

El ojo seco puede dividirse en dos grandes tipos, (dependiendo del componente lagrimal que esté afectado mayoritariamente), teniendo ambos un enorme listado de factores causales y factores de riesgo para padecerlo.

Si bien la lista es extensa, el objetivo de este informe es puntualizar sobre una causa muy importante y muy frecuente de ojo seco, pero más importante aún, una causa sobre la cual podemos actuar: la exposición prolongada a pantallas, que aumentó drásticamente en las circunstancias de pandemia y virtualidad que nos afectan a todos.

Cuando pasamos mucho tiempo delante de pantallas (además de estar expuestos a la radiación que emiten las mismas) nuestra frecuencia de parpadeo disminuye, generando que el film lagrimal se renueve con menor frecuencia. Esto altera el equilibrio del sistema lagrimal/superficie ocular, interfiriendo con las importantes funciones que se mencionan arriba y dando lugar a la aparición de síntomas.


La buena noticia es que con simples medidas, de fácil realización, PODEMOS HACER MUCHO POR NUESTRA SALUD VISUAL.
Estas medidas son:
1) Utilizar lágrimas artificiales (carboximetilcelulosa, trehalosa, glicerina, etc) 1 gota en cada ojo/ 4 veces por día. Si bien existen diversos tipos de ojo seco y cada uno conlleva un tratamiento específico, el uso de lágrimas artificiales produce una
mejoría síntomática significativa en la mayoría de los casos. Evitá los colirios comerciales.
2) Evitar los ambientes muy calefaccionados o con aire acondicionado direccionado a nuestro lugar de trabajo (en estos ámbitos con calefacción/refrigeración que “secan el aire” un humidificador puede ser un gran aliado). El humo tampoco es buen amigo de nuestros ojos. Todos estos factores exacerban los síntomas.
3) Tomar descansos de la pantalla cada 20 minutos, procurando focalizar la vista en un punto lejano (p. ej: mirar por la ventana).
4) Bajar el brillo de la pantalla de tus dispositivos electrónicos y si tienen la función “filtro de luz azul”, activala!
5) ¡NO frotarse los ojos! Es la primer reacción frente al tipo de molestias ocasionadas por el ojo seco: frotarse frenéticamente los ojos en busca de alivio, pero cuidado, esto puede debilitar y dañar nuestra córnea, por lo cual resulta fundamental evitarlo.
6) Hacer el control con el oftalmólogo periódicamente; salvo indicación contraria, 1 chequeo anual es suficiente. Independientemente de que tengas o no síntomas de ojo seco, cuidar nuestros ojos es muy importante!
7) Mantener actualizada la prescripción de tus lentes. Muchas veces adoptamos posturas incómodas frente a la pantalla que derivan en dolores cervicales, cefaleas y problemas posturales y suelen ser para compensar la falta de una visión correcta con los anteojos que tenemos.
8) Si vamos a renovar los lentes, de ser posible, solicitar un filtro de luz azul. Esto es especialmente útil ya que filtra y protege de la radiación de luz azul emitida por la inmensa mayoría de las pantallas que utilizamos actualmente.