El Tribunal Oral en lo Criminal 5 de San Isidro condenó a prisión perpetua a Ernesto Luque y Débora Acuña, por resultar coautores penalmente responsables del delito de homicidio doblemente calificado contra el policía Aldo Garrido, asesinado en febrero último la provincia de Buenos Aires.

Así, el tribunal, integrado por los jueces Mario Kohan, Raúl Neu y Ariel Introzzi Truglia, hizo lugar al pedido del fiscal Eduardo Vaiani y del abogado Marcelo Rochetti, en representación de la viuda de la víctima, Marta Barberis, quienes solicitaron la pena de prisión perpetua para los imputados.

En el veredicto, el tribunal destacó la "violencia ejercida resultó una actitud cruel y de fiereza innecesaria advertida en la circunstancia de que Acuña disparó con Garrido ya caído (como lo reconociera la imputada al declarar en este juicio), demostrando no solamente las actitudes mencionadas en forma precedente sino una frialdad en la ejecución del hecho que hiela la sangre".

Los jueces determinaron también que el delito de homicidio doblemente calificado concurre en forma real con el robo calificado por el uso de armas, cometidos ambos en un comercio de la zona de San Isidro el 17 de febrero pasado, día en el que Garrido fuera asesinado luego de advertir el asalto. Además, el tribunal declaró reincidente a Luque, que contaba con libertad condicional por otra condena.